viernes, 25 de junio de 2021

Schopenhauer S XIX

 


            


Schopenhauer
    S XIX

 

Su obra principal  El mundo como voluntad y representación, escrita en la década de sus veinte años, la escribió en cuatro años y fue publicada en 1818;  un segundo ejemplar complementario le siguió en 1844, con observaciones sobre lógica, ética, epistemología,  percepción,  ciencias, metafísica y las relaciones del individuo con los demás y consigo mismo.

Es la  descripción de la condición humana  en sus aspectos más sombríos: la muerte, la desolación, el sin sentido de la vida y el sufrimiento inherente de la existencia. 

Excepto Platón, no existe otro autor con este desolado panorama. En los últimos años escribió un conjunto de ensayos y aforismos filosóficos denominados en griego  Obras sueltas y complementarias.Todavía no se había descubierto la psicoterapia, aunque varios de sus páginas aluden a  esa potencial ciencia. 

Schopenhauer admite que, si bien no podemos conocerla, sí podemos acercarnos a ella, porque ésta no tuvo en cuenta nuestro cuerpo, el mundo percibido en el tiempo y el espacio.  En cambio, la mayor parte de nuestra vida psíquica  es desconocida, porque la reprimimos. 

Se publicó cuarenta años antes del nacimiento de Freud. Y cuando éste y Nietzsche,  eran  niños, Schopenhauer era el filósofo más leído de Alemania.

Opinaba que el sexo y los impulsos sexuales tenían un papel definitivo en la conducta humana; mostró ser  intrépido y audaz. Negó lo sobrenatural, afirmando que vivimos esta vida,  siendo  el resto innecesario. Admite que el dolor  pone guijarros en el camino. 

El foco es el sexo, donde la voluntad anticipa el deseo en el sentido que tenía para Freud, voluntad inconsciente, el ser interior.

Por cada deseo satisfecho existen otros diez insatisfechos. Cada deseo colmado cede, al  nacer  otro, y así sucesivamente. 
Decir yo significa yo quiero y ese querer es el origen de todos los sufrimientos. Todo querer nace de una necesidad causada por una carencia aunque, satisfecho el deseo,  se comienza a anhelar otra cosa.

Aclara el dilema de la existencia humana, evocando el mito  "El suplicio de Tántalo". La vida humana rueda  sin cesar  entre el deseo y la saciedad. Cuando uno se  sacia  y luego se  hastía,  empieza de nuevo la búsqueda de otro anhelo insatisfecho. Pero, si el deseo se colmara: ¿En qué emplearía el tiempo  el hombre? Supongamos que la raza humana se trasladara a un reino utópico, donde  las palomas volaran ya doradas, listas para comer, o donde  encontráramos el amor y no tuviéramos dificultad en conservarlo;  el ser humano moriría  empalagado.

La causa más temible de saciarse es un estado  donde no exista nada para distraernos o revelarnos las verdades intolerables de la existencia: lo insignificante,  el sin sentido  y el inexorable camino que nos lleva   al deterioro y la muerte.

La vida humana es un incesante ciclo de deseos- satisfacciones- hastío y deseo una y otra vez. El hombre  nunca es feliz in aeternum,  aunque emplea toda  su existencia  en pos de lograrlo. Pero si la obtuviera, finalizará en una decepción. La vida  es  un fugaz momento presente, perdido para siempre. En los días  de dicha ignoramos el dolor que el destino nos oculta  (enfermedad, pobreza, muerte).

Existen en su última etapa tres notables ensayos sobre cómo obtener y conservar el sentido de la propia autoestima. 

Schopenhauer deseaba ciertamente la fama: dos años antes de su muerte dio su obra por terminada y con alivio exclamó: “limpiaré mi pluma y diré: el resto es silencio”. Con publicaciones anteriores no vendidas  y una crítica poco entusiasta, convenció a un editor de Berlín que editase setecientos cincuenta libros; él se quedaría con un 10%,  sin cobrar derechos de autor.

El primero “Lo que un hombre es”, describe la manera como el pensamiento creativo origina una sensación de riqueza interior, donde se supera el vacío y el tedio de la vida.

El segundo  “Lo que un hombre tiene” es un modo de compensar la pobreza interior, donde la incesante acumulación de bienes terminará por poseerlo.

El tercero Lo que un hombre representa” expresa la fama, como algo secundario. El bien esencial de una persona es su propia valía: el  valor en sí   es  el mérito interior  que produce una autonomía individual, que nada ni nadie nos la podría quitar: en cambio  la fama es intercambiable.

Schopenhauer tiene escritos impregnados de amargura por su falta de éxito.  Un  día el texto que describió la locura de perseguir la fama, lo hizo famoso. Suavizó su pesimismo, detuvo sus lamentos y ofreció consejos sabios. Adoptó un punto más pragmático: “estamos condenados a vivir y debemos buscar la forma de hacerlo, sufriendo lo mínimo posible”. Nos introduce a  pensar de modo independiente: conservar el escepticismo y la racionalidad,  evitar los  tranquilizantes artificiales, alcanzar la autoestima,  correr pocos riesgos y  evitar apegarnos a  potenciales pérdidas. Todo pasa: nada tiene demasiada importancia. 

Tuvo una sola idea y la desarrolló minuciosamente. Su pensamiento se reduce a un solo núcleo.

Kant  procuró establecer los límites del conocimiento y limitó  los desbordes de la metafísica. Schopenhauer se ocupó con genialidad de afirmar qué era la cosa en sí (o numen) y le dio  la importancia a la metafísica, pues -según él- el hombre es un animal metafísico;

El filósofo estuvo atento a los Vedas y al budismo y afirma que la salvación está en el desapego o la renuncia de los ascetas orientales  y de los santos en occidente (San Juan de la Cruz, el santo de las Nadas) Porque, mientras aspiremos no encontraremos la felicidad ni la paz . Sin embargo en la contemplación de la belleza la voluntad queda en suspenso y nos transformamos en sujetos puros de conocimiento, sin estar sometidos a la voluntad, al deseo, al querer.

El artista  es igual a un genio, pues se pierde en la creación y descubre lo esencial de las cosas sin condiciones.

Pertenece a los años de la filosofía salvaje como Kant, Schelling, Fichte, Hegel y los primeros años de Marx, todos ellos le opacaron el brillo  pero finalmente -en los últimos años- le llegó  la fama gozando de este éxito tardío. Por primera vez se disipó su escepticismo.

Gran Bretaña lo alabó, la prensa alemana lo tradujo; fue  publicado en Francia e Italia;  hasta Wagner le envió el libreto original de El anillo de los Nibelungos con una dedicatoria. En las universidades se  enseñó su obra; los eruditos lo invitaban, sus libros  se publicaron; varios fueron sus textos seleccionados,  publicados  por separado con  consejos y máximas. Es  una filosofía práctica con temas  religiosos y  diálogos.  Y en poco tiempo sus escritos fueron la delicia del lector alemán culto.

EL MITO DE LA CAVERNA

 

 El mito de la Caverna   

 

Unas personas sentadas, colocadas en un orden  previamente determinado, sin libertad y sin  acceso directo a la realidad, donde sólo perciben sombras, aunque para ellos consisten en  la verdad.

La mayor parte de nosotros estamos en situaciones similares; percibimos lo que parece ser una verdad, pero siempre hay algo más allá, que no alcanzamos a captar: hechos y circunstancias ocultas bajo lo percibido.

Para Platón, quienes salen de esa situación y alcanzan a conocer la verdad, tiene la obligación de regresar a  la caverna para contar  el conocimiento adquirido aunque corra el riesgo de no ser creído o de ser atrapado.

-.-.-.-.

«Filósofo es quien ascendió hasta la contemplación de la Idea de Bien». sabemos que los  atrapados en la caverna, entre luces y sombras, perciben una realidad inválida,   engañados por una realidad que no pueden ver.

Esa caverna representaba la polis o ciudad-estado de su tiempo, con su política, su vida social y los intereses del poder.

En la época clásica, los valores apreciados por los filósofos tenían como base las ideas de "el bien, la belleza y la verdad», opuestos a "la maldad, la fealdad y la mentira».  La bondad, la verdad y lo bello necesitan de lo «justo» para poseer valor, tema esencial en La República de Platón.

El filósofo que busca la verdad  no desea quedar atrapado por modas, circunstancias ni autoridades.

 El hombre que piensa, más allá de las ideas utilitarias o permitidas, que indaga más allá de las palabras de moda o impuestas por la costumbre, carga  el peso de una humanidad doliente.

 La República de Platón

sábado, 12 de junio de 2021

Filosofía antigua, en la Edad Media y en la Edad Moderna

    

 

La filosofía antigua

 

 

La filosofía estudia los objetos, desde el punto de vista de la totalidad, mientras que las ciencias particulares son sectores parciales, provincias dentro del continente. La filosofía será la disciplina que considera su objeto siempre desde el punto de vista universal y totalitario

Sócrates nunca escribió. Platón lo recrea en sus Diálogos.

Platón: la  filosofía es el  saber racional, el saber reflexivo,  adquirido mediante el método dialéctico.

Platón:

Diferencia  entre la opinión y el conocimiento.  

 «doxa» u opinión  es el saber  vulgar  y

 «epísteme»  es un saber racional y reflexivo, que necesita un método;  Platón  llama  a su método  dialéctica;  consiste en afirmar algo y luego negar y discutir esa tesis para  llegar al conocimiento verdadero,  que resiste  toda  crítica y    discusión.

Aristóteles: EL conjunto del saber humano es  filosofía.

Para Aristóteles  el hombre conoce  ciertas cosas después de haberlas estudiado e investigado.   

La filosofía se divide en diferentes partes. En la época de Aristóteles eran:

a) La lógica: estudia los medios y métodos de adquirir el conocimiento para alcanzar el conocimiento del ser de las cosas.

b) la física: es el conjunto del saber acerca de todas las cosas -el alma humana y la psicología entran dentro de la física-. 

 c) la ética. las   actividades del hombre, lo que el hombre es y produce, El hombre  va a la guerra, tiene familia, es músico, poeta, pintor, escultor, político  etc.

 

La filosofía en la Edad Media

 

El saber humano, en la Edad Media, se dividió en dos grandes sectores:  filosofía y  teología.

Una serie de  ciencias se separan del tronco de la filosofía  como una disciplina aparte. Todos los conocimientos  sobre Dios forman  la teología.

 La filosofía es el conjunto de los conocimientos acerca de las cosas.  Siguió  así hasta  el siglo XVII.  Todavía hoy existen residuos de ese sentido totalitario de la palabra filosofía.  En el siglo XVII, el libro de Newton habla sobre la teoría de la gravitación universal: es  un libro de física llamado  Principios matemáticos de la filosofía natural.

En tiempos de Newton, la palabra filosofía significaba  lo mismo que en tiempos de Aristóteles: (la ciencia total de las cosas).  En la actualidad, Alemania  divide los estudios en: la Facultad de Derecho,  de Medicina, de Teología y  de Filosofía.  En Filosofía  se estudia  lo que no es ni derecho, ni medicina, ni teología. En una misma Facultad estudian la psicología, la metafísica y la ontología. Queda un residuo del viejo sentido de la palabra filosófica en las facultades alemanas.

 

La filosofía en la Edad Moderna

 

A partir del siglo XVII la filosofía empieza a desgajarse: las  ciencias particulares se separan de la filosofía, se  constituye con su objeto , su método  y sus progresos; poco a poco  se van especializando.

 Descartes es  filósofo, matemático y físico.

 Leibniz es  matemático, filósofo y físico. Todavía son espíritus enciclopédicos. Descartes y  Leibniz, como  Aristóteles  abarcaban toda la ciencia conocida.

 Kant no sabía toda la matemática , ni la física, ni la biología de su tiempo. No descubre nada  esas ciencias particulares, mientras  Descartes y Leibniz  descubren teoremas  en física y en   matemáticas.

A partir del siglo XVIII  no existe ningún individuo capaz de contener la enciclopedia del saber humano;  a partir de ese momento,  la  filosofía se separan las matemáticas, la física, la química, la astronomía.  

La ontología, la metafísica, la lógica, la teoría del conocimiento, la ética, la estética, la filosofía de la religión, siguen formando  parte de  la filosofía.

la psicología y la sociología  hoy son  ciencias  independientes . Augusto Comte  nombró a la sociología como la filosofía positiva.

 Las ciencias particulares se  desprendieron de la filosofía cuando logró encerrar un trozo de la realidad, y dedicar su atención a ese aspecto de la realidad. Así, por ejemplo, pertenece a la realidad el número y la figura, por lo cual quedan constituidas las matemáticas como una ciencia independiente. Si  otro trozo de la realidad, como los cuerpos materiales  en sus relaciones unos con otros, se destacan como  objeto  de investigación,  se constituye la ciencia física. Cuando la vida de los  animales y plantas,  se separa del resto de las cosas, se constituye la biología. Grandes sectores de la realidad se   han especializado  del todo; deliberadamente  renuncian  a ser objetos totales.

Una ciencia se sale de la filosofía cuando renuncia a considerar su objeto desde un punto de  vista universal y totalitario.

La ontología no recorta  un segmento de la realidad para estudiarlo  por separado.  La teoría del conocimiento se refiere a todo el  saber.  

 Las ciencias particulares, matemática, biología, anotomía,   física,  química  las considera  desde un punto de vista parcial.

La filosofía  estudia  todo aquello que es objeto de conocimiento universal y totalitario; se divide en  dos grandes ciencias:  a) la ontología, el estudio de todos los objetos,  y b) la gnoseología o el saber es el estudio del conocimiento de los objetos  conocidos e  inteligibles. 

Distinguiendo entre el objeto y el conocimiento,  tendremos dos grandes capítulos de la filosofía. la ética, la estética, la filosofía de la religión;- antes la psicología y la sociología entran  en el campo de la filosofía-

 Las Ciencias particulares tienden  a particularizar el objeto. La ética  trata de la acción humana, de los valores éticos. La estética  trata  del arte, de la belleza y de los valores estéticos. La filosofía de la religión también circunscribe su objeto. 

La filosofía designan la totalidad del saber humano;  de ella se  desprenden  las ciencias particulares porque aspiran a la  especialidad,

 La ontología se ocupa del ser en general; la ciencias particulares  desean ser independientes; la psicología y la sociología lo lograron.  Tal vez algún día la ética y la estética lo logren.

Disposición de ánimo: admiración, rigor.

los métodos filosóficos, adquiere  un aspecto real, profundo, cuando se ha practicado

Descripción  de los principales métodos filosóficos

disposición de ánimo es absolutamente indispensable EL ASOMBRO desde una disposición infantil,  hacerse como un niño pequeño, percibir y  sentir lo misterioso, plantarse ante el universo con un sentimiento de  curiosidad insaciable, como el niño para quien todo es un problema.

Dice Platón que la primera virtud del filósofo es admirarse,  tener una disposición filosófica percibiendo en la más mínima cosa  las incógnitas, que los demás no ven. Aquel a quien todo resulta natural, muy fácil de entender, no podrá nunca ser filósofo.

El hombre ya endurecido y encanecido, no suele tener aptitudes ya para serlo.     Sócrates y Platón  preferían tratar con jóvenes. La  admiración es una  disposición fundamental para la filosofía, la capacidad  de convertir todo  en problema.

Otra disposición  es el espíritu de rigor en el pensamiento, la exigencia de exactitud. la edad mejor para filosofar es la juventud. El joven tiene una exigencia de rigor, una exigencia de racionalidad, de intelectualidad, que el hombre  maduro, con el escepticismo que la edad trae, no suele  poseer. Esta exigencia de rigor elimina  la doxa, el saber común, popular que se condensa en refranes, en tradiciones, en ideas, que la masa del pueblo pasa de generación en generación. La filosofía, reacciona contra esa supuesta sabiduría popular.

Debe explicar  sus problemas con un rigor metódico,  pero  no tiene que actuar como la síntesis de los resultados obtenidos por las ciencias positivas: haber descubierto la neurona,  elemento mínimo del sistema nervioso, no autoriza a un neurólogo, a escribir sobre los problemas elementales de la filosofía que es una disciplina rigurosa. Cada ciencia tiene un objeto delimitado, mientras la filosofía se ocupa de cualquier objeto en general.

Sócrates y la mayéutica

Para  describir  los métodos, recurrimos  a la historia de la filosofía. A partir del siglo IV a. C en Atenas. Sócrates es  el primer filósofo que  habla de su método la  mayéutica, que consiste en preguntar para  llegar a la esencia de  un  concepto;  a  un general que pasa  por la plaza le pregunta: ¿qué es la valentía? ¿qué es ser valiente?  Tú tienes  saberlo. ­

-La valentía consiste en atacar al enemigo y en no huir jamás.

Sócrates  le responde :

- No es  una respuesta  satisfactoria, pues muchas veces en las batallas retroceder, para atraer al enemigo a una determinada posición y destruirlo, es una táctica genial.

El general  da otra definición; otra vez Sócrates lo critica. pide otra nueva definición y, a fuerza de preguntas ,  la definición  mejora hasta quedar ajustada lo mejor posible. Nunca  llega a ser perfecta.

 En  los diálogos de Sócrates, que  Platón nos dejó –reproduce con bastante exactitud  las escenas de preguntas y respuestas,  que se interrumpen,  dando a entender que  los misterios en la última definición dada no  puede acabar nunca.

 

Platón  perfecciona el método socrático de  preguntar: la mayéutica de Sócrates se convierte en  la dialéctica; su método es una opinión y la crítica: partir de una hipótesis  ir   mejorándola a través de la crítica, en el intercambio de afirmaciones y de negaciones.

 La dialéctica se divide en dos momentos: a) consiste en la intuición de la idea  torpe e insuficiente; el camino por donde   iremos hacia la conquista de esa idea.

b)  Consiste en el esfuerzo crítico para aclararla intuición de la idea,  que se va depurando  hasta acercarse  a la meta; esta realidad no puede nunca ser perfecta en este mundo.

PLatón divide el mundo  real del mundo ideal. Lo expone en  un mito para expresar su pensamiento filosófico y  apela a ellos en el mundo de las ideas,  que llama "topos uranos", donde habitan las almas en perpetua contemplación de la belleza de las ideas, conociendo la verdad sin esfuerzo.

Pero esas almas, regresan  a la tierra y se alojan en  cuerpos humanos;  deben someterse a las condiciones  terrestres  y al olvido de las ideas que conocieron en el "topos uranos", donde moran las ideas. Bastará un esfuerzo bien dirigido,  algunas preguntas bien hechas  para que logren  algún vago recuerdo de esas ideas, cuando  vivían en el mundo de las ideas.

 La dialéctica consiste para Platón en una contraposición de intuiciones sucesivas, donde cada una   aspira a ser el concepto, de la esencia, y así sucesivamente, en diálogo o contraposición de una a otra intuición, se llega  a depurar lo más posible  esas esencias ideales,  que constituyen la verdad absoluta.

 

Aristóteles discípulo de Platón, desarrolla  el método de la dialéctica,  se fija  en ese movimiento de la razón intuitiva que pasa, por medio de la contraposición de opiniones, de una afirmación a la siguiente y de ésta a la siguiente. Se esfuerza por encontrar la ley, en virtud de la cual de una afirmación pasamos a la siguiente; es el origen de la lógica. ya Platón, en su dialéctica, tiene una lógica implícita, pero Aristóteles  le da estructura y forma definitiva. o sea la teoría  de una proposición que sale de otra proposición.

Hay muchos silogismos diferentes, donde de una proposición general, por medio de otra proposición también general, se extrae una proposición particular. Las leyes del silogismo, es  la aplicación de las leyes del pensamiento racional que nos permite transitar de una posición a otra posición por medio de los  conexiones de los conceptos más generales con otros menos generales, hasta llegar a lo particular. Esas leyes del pensamiento racional son para Aristóteles el método de la filosofía.

La filosofía  consiste en la demostración de la prueba. La prueba de las afirmaciones  las convierte  en verdad: una afirmación  no probada no es verdadera.  

 

Edad Media

La disputa. Esta concepción de la lógica, como método  filosófico, es heredada de Aristóteles por los filósofos de Medievales donde la aplican con  rigor.  Santo Tomás de Aquino completan el método de la prueba, -el método del silogismo-, con una especie de dialéctica platónica. El método que siguen los filósofos de la Edad Media no es solo, como en Aristóteles, la deducción, la intuición racional;  es la contraposición de opiniones divergentes. Santo Tomás, cuando examina una cuestión, no solamente deduce de principios generales los principios particulares;  pone en columnas separadas las opiniones de los distintos filósofos en pro y en contra; las pone frente a frente, las compara unas con otras, extrae de ellas lo que puede ser verdadero o falso; el resultado de esta comparación de opiniones diversas, con el ejercicio de la deducción y de la prueba, da lugar a las conclusiones firmes del pensamiento filosófico medieval.

Lo esencial  de este método es la segunda parte, la discusión dialéctica con la cual la intuición debe ser confirmada o negada. Lo importante  del método  escolásticos consiste  en el ejercicio racional en la dialéctica, en el discurso, en la contraposición de opiniones, en la discusión de los filósofos entre sí o del filósofo consigo mismo.

 

El método de Descartes.

A  partir de Descartes, el método cambia  y el acento  recae  sobre la intuición. si el método filosófico en la antigüedad y en el Medioevo  se ejercitan después de la intuición, el método filosófico en la Edad Moderna  se ejercita  en el medio para obtenerla.  En el Discurso del Método, a Descartes le preocupaba  cómo llegar a una evidencia clara y distinta;  cómo llegar a una intuición,  sin  tener dudas  de la verdad, cuáles son  los caminos que conducen a esa intuición. El método es pre-intuitivo  y tiene como propósito lograr la intuición. Lo logra dividiendo todo objeto que se nos ofrezca confuso, oscuro, no evidente, en partes, hasta que alguna de esas partes se nos convierta en un objeto claro, intuitivo y evidente. Entonces ya tenemos la intuición.

 

Trascendencia e inmanencia

 

Platón sostenía que   este mundo  es el reflejo de la verdad absoluta. Son dos mundos  separados.

Para Descartes este mundo en donde vivimos y el mundo de la verdad son uno y el mismo mundo. No son dos mundos distintos, los dos constituyendo un todo.  Por medio del análisis introducimos claridad  y  el  concepto  oscuro se convierte en claro.  

 

Los conceptos filosófico de la "trascendencia" y de la "inmanencia."  

A partir de Descartes  se postula la inmanencia del objeto filosófico. La intuición tiene que discernir, a través de la caótica confusión  todas las ideas claras y distintas que constituyen su esencia. El análisis  es  desde allí el método que conduce a la intuición y   toda la filosofía posterior a Descartes  se acentúa  en la intuición. Después de Descartes, la intuición sigue siendo el método por excelencia de la filosofía.

A principios del siglo XIX, los filósofos en Alemania  formaron esa  escuela filosófica llamada filosofía romántica alemana con  Fichte, Schelling, Hegel,  quienes consideraron que el método esencial de la filosofía era la intuición intelectual. Hay una contradicción, porque la intuición no es intelectual;  es un acto simple, por medio del cual captamos la realidad ideal de algo: es  en cambio intelectual lo que Aristóteles desenvuelve bajo la forma de la lógica.  Estos tres consideran la intuición intelectual como el método de la filosofía, porque le dan a la razón humana una doble misión: la de penetrar intuitivamente  en la esencia de las cosas, bajo la capa del mundo aparente de las percepciones sensibles. La segunda misión de la razón es, partiendo de esa intuición intelectual, construir a priori, sin valerse de la experiencia, en un modo apriorístico.  Un primer momento de intuición intelectual donde  los filósofos alemanes de la época romántica (Fichte, Schelling, Hegel, Krause, Hartmann, Schopenhauer) tienen una  iluminación, una intuición intelectual, que los hace penetrar en la esencia  de la verdad . Para ellos, el método de la filosofía   consistía en una primera intuición  radical  y luego en el  desarrollo de esa intuición en las múltiples formas de la naturaleza, del espíritu, de la historia, del hombre, alimentados con  la filosofía de Kant, compleja con  un sistema complicado y  difícil.

Kant diferencia  entre el mundo a priori,  intuitivo y  un mundo  a posteriori que parte de la experiencia sensible. Entre el mundo de la realidad, sensible, y el mundo a priori, desconocido, profundo y misterioso,  por debajo del espacio y del tiempo existe una visión intuitiva del espíritu, que contiene la esencia y la definición de todo lo demás; cuando   captemos por medio de una visión espíritual lo absoluto, captaremos intuitivamente  todas las cosas concretas del mundo.

 su filosofía llevaba siempre dos movimientos. Un movimiento místico, de penetración de lo absoluto, y  otro movimiento de la explicación de lo absoluto, en sus formas variadas del arte, de la naturaleza, del espíritu, de la historia, del hombre, etc.

Esta método de filosofar domina en Alemania desde 1800 hasta 1870. Cuando declina, es sustituida por  otro método.  

Desde  1870, cambian  su idea del método,  aunque no dejan de conservar lo esencial de él, tanto de los antiguos como de los modernos,  desde el Renacimiento.

 


EL EXISTENCIALISMO

 

El existencialismo considera que la existencia precede a la esencia. El hombre se siente abandonado al ser libre y –arrojado al mundo- es responsable de sus actos. Elegir una idea, 

una filosofía es ya comprometerse. El desamparo implica elegir nuestro Ser, lo cual lleva a la 

angustia.

Las cosas serán tales como yo decida que sean. Comprometerse lleva a actuar; haré lo 

imposible para que llegue a la colectividad.

Si mis posibilidades no están comprometidas por mi acción, se pierde el interés: sólo existe realidad en la acción. La persona es un proyecto en la medida en que no se realiza. Es el conjunto de los actos en su vida . Proust es la totalidad de su obra y el genio de Racine son sus tragedias.

Para el que no se realizó es terrible porque será el Pre-Ser de Heidegger. El hombre es el conjunto de las acciones que lo forman. Siempre está realizándose. Es persiguiendo fines trascendentales como puede existir.

Uno se elige a sí mismo, frente a los otros, aunque la elecciones estén fundadas en el error o en la verdad.

Es el compromiso libre por el cual cada uno se realiza y la elección es posible al elegir no elegir, también elijo. Afirma que el cobarde se hace cobarde y el héroe se hace héroe; lo que cuenta es el compromiso total. No se nace cobarde o héroe; sólo hay una moral de acción, de compromiso.

A diferencia del “Yo y mis pensamiento” cartesiano es “Yo y mis acciones, de las cuales soy responsable”. Otorga dignidad al individuo, pues el hombre decide lo que es.

Las situaciones históricas varían. Lo que no varía es la necesidad de estar en el mundo, de ser mortal mediante mi acción.

No existen valores estéticos a priori (Kant), aunque se vean a posteriori.

En la relación entre voluntad, creación y el resultado obtenido, Picasso se ha construido al mismo tiempo que pintaba;  el conjunto de su obra se incorpora a su vida.

EL Existencialismo no intenta demostrar que Dios no existe. Más bien declara: “aunque Dios existiera, no cambiaría.”

El problema no es su existencia; es necesario que el hombre se encuentre a sí mismo, que nada pueda salvarlo de sí mismo. Es una doctrina de acción, no de desesperación.



Bibl: Sartre, Paul. El existencialismo es un humanismo.